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Juguetes interactivos: usos y beneficios

Particularmente me gusta trabajar las estimulaciones sensoriales de los perros en las diferentes etapas de su vida, desde el período neonatal a la senectud hay trabajos interesantísimos para realizar con ellos. Está demostrado que la estimulación mental retrasa el envejecimiento cerebral y en esta nueva entrada nos centraremos en ella y hablaremos de los juguetes…

Particularmente me gusta trabajar las estimulaciones sensoriales de los perros en las diferentes etapas de su vida, desde el período neonatal a la senectud hay trabajos interesantísimos para realizar con ellos.

Está demostrado que la estimulación mental retrasa el envejecimiento cerebral y en esta nueva entrada nos centraremos en ella y hablaremos de los juguetes interactivos y sus beneficios.

La dividiremos en dos partes pues no todos los juguetes son iguales ni el objetivo será el mismo cuando trabajamos con nuestro perro.

Si decidís trabajar con estos juguetes lo ideal sería acompañar esta información con un asesoramiento profesional para obtener el máximo beneficio educativo del animal, y del vuestro. Advertiremos que no todos los perros responderán del mismo modo ante su juguete interactivo.

Hay perros que si presentan problemas de comportamiento como agresividad, posesividad, excitabilidad, ansiedad, etc., habrá que tener cuidado con el uso de estos juguetes y recomiendo el consejo profesional. Existan o no problemas de conducta lo que está claro es que a través de estos juegos desarrollaremos la inteligencia de nuestro amigo.

Y recordad que la amplia gama existente de atractivos juguetes interactivos para perros, nos ayudará a todos a mantener nuestra mente “en forma” como veremos a continuación:

 

PARA JUEGOS EN SOLITARIO

Los Kong

La Kong Company, estableció el estándar de los juguetes para mordisquear a mediados de la década de los setenta. Su director Joe Markham inventó el Kong para su pastor alemán Fritz en 1976; así sustituía las piedras que dañaban su dentadura por unos juguetes de goma dura que harían las delicias del animal; pasaría unos años experimentando con diferentes compuestos para conseguir producir un juguete de similar tamaño y forma, que el de su perro, para poderlo vender a los propietarios de mascotas. Los Kong fueron ganando poco a poco popularidad siendo los precursores de los juguetes de inteligencia: “las mascotas se concentran en la extracción de la comida en lugar de la destrucción del juguete”.

Estos juguetes son seguros, de máxima calidad; ayudan a nuestros perros a solucionar problemas de conducta, a estimularlos, fortalecen las mandíbulas o simplemente los mantienen entretenidos.

Las formas, tamaños y diseños son tan variados y dinámicos que es una marca de confianza que continuamente lanza nuevos productos para adaptarlos a la demanda del mercado y, especialmente, me gusta recomendarlos.

Continuará…

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